Parecía el crimen perfecto. Sin embargo, la víctima registró el momento exacto en el que su exnovio se da vuelta, le apunta con un arma y mientras ella ríe le dispara en la cabeza. El celular cae al piso y termina la grabación de 10 segundos que hoy conmociona a Brasil.

El crimen ocurrió en el estado brasileño de Goias y los protagonistas de la secuencia son Diego Fonseca Borges, de 27 años, y su exnovia, Ielly Gabriele Alves, de 23. Tras el certero disparo, el asesino intentó desentenderse del crimen. En conversación con el diario O Globo, el jefe policial local Thiago Saad, a cargo del caso, dijo que el acusado contó una versión inconsistente a la policía cuando aún estaba en unidad de salud, después de la muerte de la víctima. Luego lo llevaron a la comisaría a declarar y, en ese momento, la tía de la víctima llevó el celular a la policía, donde estaba el video que incriminaba al exnovio.

Desde ese momento, el joven de 27 años está preso por homicidio calificado. La policía está investigando si hubo premeditación, ya que, presentó una versión falsa del crimen antes de que el vídeo lo desenmascarara. La Policía Civil de Goiás investiga si la muerte de Alves fue premeditada y qué motivó el asesinato. El hombre está detenido por homicidio calificado por haber utilizado recursos que dificultaron la defensa de la víctima, pudiendo ser acusado también de feminicidio.

La joven registró el momento exacto en el que, en medio de lo que parecía una conversación relajada entre ambos, su exnovio, con quien aún mantenía una relación, le apuntó con el arma a la cabeza y disparó.

La primera versión que el asesino dio ante las fuerzas de seguridad es que había pasado una motocicleta con dos muchachos que dispararon armas de fuego y que un tiro alcanzó a su exnovia. Sin embargo, no pudo explicar exactamente dónde ocurrió el incidente y cómo sucedió. Allí fue donde la policía empezó a encontrar esto muy extraño.

Cuando se confirmó la muerte de la víctima, los peritos analizaron el cuerpo y se dieron cuenta de que el orificio de entrada de la bala no coincidía con la versión presentada por asesino.