A mediados de este mes, se inició la huelga por tiempo indeterminado de los actores de cine y televisión de Hollywood. Es primera medida de fuerza que llevan adelante los actores desde 1980 y el paro, al mismo tiempo, adquirió connotaciones todavía más fuertes, verdaderamente históricas, porque se unió a una medida de fuerza similar que vienen aplicando los guionistas. En la escalada del conflicto, estrellas consagradas se sumaron a las manifestaciones que tuvieron lugar en Los Ángeles y en Nueva York. En la escalada del conflicto, la actriz Fran Drescher, presidenta del SAG - AFTRA (Sindicato de Actores de Hollywood) criticó con dureza a Bob Iger, CEO de Disney, luego de que éste afirmara que los huelguistas no eran “realistas” en el planteo de sus demandas.

A lo largo de esta semana, en el poderoso circuito teatral de Broadway las aguas también bajan un tanto turbias. En estos últimos días, se manejó la posibilidad del inicio de otra medida de fuerza que hubiera implicado la bajada del telón de los espectáculos de Broadway, si el sindicato que representa a 1.500 tramoyistas y otros técnicos aprobaba una huelga en demanda de mejoras laborales. “Esta votación sobre la huelga enviará un mensaje contundente , no aceptaremos contratos inferiores que no reconozcan las contribuciones de nuestros trabajadores”, declaró Mathew Loeb, presidente de la Alianza Internacional de Empleados Teatrales de Escena (IATSE, según sus siglas en inglés).

Pero ayer, el sindicato alcanzó un acuerdo con Disney Theatrical Group y la Liga de Broadway, que representa a propietarios de teatros y productores, anunciaron las partes en un comunicado. El pacto debe ser todavía ratificado por las bases de IATSE y se presentará a los afiliados en los próximos días, agregó el boletín.

El sindicato que encabeza esta demanda agrupa tramoyistas, peluqueros y maquilladores, personal de vestuario y otros técnicos del detrás de escena. De haberse concretado la medida de fuerza, la huelga habría implicado la paralización de 28 grandes producciones de costos millonarios que están haciendo funciones en Nueva York, como las de otros 17 espectáculos producidos por Broadway que están de gira por Estados Unidos y Canadá.

Para la vida económica de Nueva York, la actividad del circuito teatral de Broadway es un factor clave, mucho más después del efecto verdaderamente devastador que provocó la pandemia con la pérdida de millones de dólares por la obligada paralización del sector. Con la vuelta a la actividad y la reactivación del turismo, el movimiento en boleterías en Nueva York viene recuperando este año sus marcas previas a la pandemia (como está sucediendo en la escena comercial de Buenos Aires en la que, durante el mes pasado, superó niveles de audiencias de 2017). En Nueva York, un total del 88,4 por ciento de las butacas de los espectáculos del circuito de Broadway se llenó en la temporada 2022/2023, una cifra equiparable al 89,7 por ciento de la temporada 2018/2019, que fue la última completa antes de la pandemia.

De todos modos, el acuerdo provisional logrado ayer deberá ser ratificado por los afiliados de base antes de que pueda entrar en vigor y poner fin al riesgo de huelga. En los últimos años, según consigna la CNN, algunos sindicatos han visto cómo sus afiliados votan en contra de la ratificación de los acuerdos recomendados e incluso fuerzan la huelga.

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