El Día Internacional del Vegetarianismo se celebra el 1° de octubre de cada año. Se trata de una efeméride que nació en 1977 como una propuesta de la Sociedad Vegetariana de los Estados Unidos para concientizar sobre el impacto de comer carne en el medio ambiente y promulga este estilo de vida que cada vez más personas adoptan. Este tipo de hábito y elección alimentaria cuenta con varias claves para lograr una dieta sana y saludable, entre las cuales la más importante es consultar con un nutricionista al respecto.

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Por los motivos que fuesen, ya sea por elección personal u otro, la transición hacia una dieta vegetariana no debe hacerse de manera descuidada. Por lo contrario, es fundamental tener en cuenta una serie de recomendaciones para lograr una dieta saludable. Algunas de las claves a considerar son las siguientes:

Variedad de vegetales: la base de una dieta vegetariana exitosa es la diversidad de productos. Incorporar una amplia gama de frutas, verduras, legumbres, granos enteros y frutos secos garantiza la obtención de todos los nutrientes esenciales.Proteínas vegetales: uno de los puntos más complejos de la adopción de este hábito alimentario está en el reemplazo de las proteínas animales. El tofu, las legumbres y la quinoa son algunos de los alimentos que son ricos en proteínas vegetales, en hierro y en otros nutrientes esenciales.Calcio y vitamina D: estos nutrientes son cruciales para la salud ósea. En una dieta vegetariana, se pueden incorporar a través del brócoli, el kale y otros productos fortificados.Suplementación con B12: la incorporación de esta vitamina en las prácticas vegetarianas para llevar una dieta sana y saludable. Puede que resulte necesario apelar a suplementos adicionales o priorizar el consumo de alimentos enriquecidos para evitar deficiencias.Control de grasas y azúcares: como en cualquier tipo de dieta, las grasas saturadas y los azúcares refinados son necesarias, pero es importante mantener limitado su consumo. La palta y los frutos secos son, por ejemplo, algunos de los alimentos que se presentan como fuentes saludables de grasa.Planificación adecuada: pensar en detalle la dieta y los alimentos que se ingieren es clave porque permite asegurarse de que todos los nutrientes necesarios se encuentran presentes en la misma. Asimismo, esto ayuda a evitar deficiencias y a llevar una alimentación equilibrada.Leer las etiquetas de los productos: a la hora de comprar alimentos procesados, revisar con atención sus etiquetas es fundamental para identificar ingredientes no deseados, ya sean aquellos que no sean propios de una dieta vegetariana o bien otros que directamente no sean beneficiosos para la salud, como podría ser un alto nivel de sodio.Cocción saludable: optar por técnicas de cocción saludables como el horneado, la cocina al vapor o la parrilla es una elección sana para cualquier tipo de dieta. En otras palabras, lo más recomendable consiste en evitar las frituras.Mantenerse hidratado: Otro consejo que sirve para la sanidad alimentaria en general es el de la hidratación constante. Además de tomar agua, el consumo de ciertas frutas y verduras favorece a la hidratación corporal.Apoyo profesional: consultar con un nutricionista especializado en dietas vegetarianas puede garantizar que se estén cubriendo todas las necesidades nutricionales de manera adecuada. Al mismo tiempo, ayuda a lograr una dieta personalizada en función de las características propias de cada organismo.

En el Día Internacional del Vegetarianismo, apostar por este tipo de dieta resulta saludable a nivel individual y también aporta lo suyo para la sostenibilidad del planeta. Una alimentación equilibrada no solo beneficia a la salud personal, sino que incluso hace lo propio con el medioambiente a través del respeto hacia los animales.