El “mundo Massa”, La Cámpora, el comando electoral de Axel Kicillof, el equipo de campaña de Leandro Santoro. Todas las tribus de Unión por la Patria que ya se zambulleron en la campaña electoral están, por estas horas, estrenando un imponente búnker vidriado de seis pisos en pleno microcentro porteño.

Los distintos equipos ya tienen oficinas designadas en la propiedad que el oficialismo alquiló en Bartolomé Mitre 363, a cien metros de la Plaza de Mayo. Desde ayer comenzaron a darse las primeras reuniones para unificar el discurso, en una campaña que por ahora se apalancó más en los anuncios de gestión que en el proselitismo puro. Pero a esa etapa le queda poco tiempo, porque en una semana comienza a regir la veda de “cortes de cinta” por la prohibición de “actos públicos susceptibles de promover la captación del sufragio”, según la ley electoral.

“La patria sos vos y vamos a defenderla”, es el slogan que por ahora instaló el oficialismo, que pretende en la etapa que va hasta las PASO subir al ring a Javier Milei mientras en Juntos por el Cambio se trenzan en su encarnizada interna Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta.

Según pudo saber LA NACION, en el flamante búnker habrá un piso para la campaña nacional que empuja la fórmula Sergio Massa-Agustín Rossi, otro para el equipo que trabaja por la reelección de Kicillof en la provincia, y un tercero para los colaboradores de Santoro, el candidato a jefe de gobierno porteño. Todo con Eduardo “Wado” De Pedro como jefe de campaña, al menos, en términos políticos. Signos de la unidad del peronismo que Unión por la Patria enarbola como bandera en esta etapa, donde todos comenzaron a tirarse flores y dejaron de lanzar flechas, como hicieron en los casi cuatro años de gobierno.

El edificio, que alguna vez funcionó como una entidad bancaria, permaneció vacío y en alquiler durante la pandemia. Según pudo reconstruir este medio, Unión por la Patria habría cerrado un contrato que ronda los $5 millones de pesos mensuales. En distintas plataformas inmobiliarias llegó a estar publicado en U$55.000 por mes. Pero el edificio no encontró inquilinos en mucho tiempo, y ahora el peronismo hará uso de las instalaciones mientras dure la campaña por un valor que, en los papeles, figura como sustancialmente menor.

El edificio es lindero al Banco Hipotecario y tiene unos 4000 metros cuadrados, con cocheras, dos ascensores, grupo electrógeno y varios pisos de oficinas con balcones que dan a un gran atrio delantero, todo con escaleras a la vista. Está construido de punta a punta con una estructura de hierro y tiene una fachada completamente vidriada. “Es demasiado transparente, todo queda a la vista”, bromeó uno de los asesores de campaña del oficialismo.

En el comando electoral, además, habrá varias salas de reunión, oficinas privadas para los principales candidatos, estudios de grabación y espacios para los equipos de redes sociales.

Hasta que el nuevo edificio estuvo a punto, el oficialismo utilizó las instalaciones del Complejo C, en Chacarita, para dar los primeros pasos de la campaña. Allí “Wado” De Pedro filmó el video en donde decía que quería ser el presidente “de todas las familias argentinas”, que se lanzó 24 horas antes del golpe de timón que llevó al peronismo a entronizar a Massa como candidato único. También se tomaron las fotos que sirvieron para ilustrar la boleta.

Además de un búnker en común, Unión por la Patria tiene como actor aglutinante al consultor catalán Antoni Gutiérrez Rubí, que asesora tanto a Massa como a Santoro, con su libreto de la campaña de “cercanía”, que se verifica en las recorridas mano a mano que están haciendo ambos candidatos.

A partir de ahora, en Bartolomé Mitre al 300 estarán todos los “fierros” de la campaña y habrá espacio para las reuniones para afilar la estrategia proselitista.