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Cartas de lectores: Estropicio, guerra a la inflación, el valor del peso

EstropicioNuevas medidas se han dictado (omito el calificativo “de gobierno” porque no lo merecen quienes dictan esas medidas). Nada tienen de nuevo. En estos días los medios han recordado med...

Estropicio

Nuevas medidas se han dictado (omito el calificativo “de gobierno” porque no lo merecen quienes dictan esas medidas). Nada tienen de nuevo. En estos días los medios han recordado medidas similares adoptadas anteriormente y que los hechos han demostrado, en todos los casos, su fracaso. Sirven para contener transitoriamente el aumento de precios, pero al final no sirven, al no atacar la causa del incremento, que es la inflación: emisión espuria para cubrir un insostenible déficit fiscal. En otras palabras, se gasta más de lo que se gana. Lo grave de lo que acabo de sintetizar en apenas un párrafo es que los responsables no lo ignoran, o no lo pueden ignorar, porque son antecedentes, hechos que han ocurrido. Tampoco pueden ignorar (y ahí está la grave responsabilidad que pesa sobre ellos) el gravísimo daño que causan, en particular a los que menos recursos tienen. Por algo siempre se ha dicho que la inflación es el impuesto más injusto.

No se trata de venganza, se trata de reclamar justicia para que algún día los responsables de este grave estropicio respondan ante quien corresponda.

Juan Pablo Chevallier-Boutell

jcheva1001@gmail.com

Guerra a la inflación

Hace 14 meses Alberto declaró la guerra a la inflación. Respiramos, pues como abogado no podía ignorar la Constitución nacional, capítulo IV, atribuciones del Congreso, art. 75, inc. 25: Autorizar al Poder Ejecutivo para declarar la guerra o la paz. ¿Pidió Alberto esto a los representantes de un pueblo agobiado por la inflación?

Patricio Avellaneda

patoave48@gmail.com

El valor del peso

El dólar no sube, el peso se cae, se desploma. Con gran tristeza lo vemos ante el desparpajo de la comunidad política gobernante.

Juan Lasheras Shine

DNI 4.528.290

Milei

Señor Milei, no arruine lo bueno que usted podría aportarle a un país harto de la “casta” haciendo escenas de absoluta intemperancia, llamando delincuente y traidor a un adversario político o recientemente tratar de extrema violencia la pregunta de Luis Novaresio que pretendía saber (como muchos de nosotros) cuál sería su actitud ante el más que probable bloqueo a sus iniciativas en el Congreso Nacional. Sus explosiones de furia no hacen más que espantar a posibles votantes, sobre todo a los de cierta edad, que valoramos la templanza y la serenidad, cualquiera que sea la circunstancia en la que le toque actuar. Demuestre que puede manifestar su desaprobación desde el respeto y los argumentos (que seguramente los tiene) sin dar la impresión de que está a punto de perder el control y saltarle a la yugular a su interlocutor. Ese autocontrol le ganaría miles de votos de aquellos que hoy simpatizamos con su proyecto, pero dudamos de su capacidad de actuar racionalmente ante los escollos que se presentarán a su gestión.

Ángel Lapietra

DNI 8.296.890

Operativo clamor

El 12 de septiembre de 1849, faltándole aún más de siete meses para terminar su mandato, Rosas presenta la renuncia ante la Sala de Representantes de Buenos Aires y los diputados se la rechazan, considerando los enormes peligros que para la tranquilidad del país supondría su alejamiento. Este acto estuvo acompañado por gran cantidad de público vivando la continuidad del gobernador. El mandato de Rosas concluía recién el 7 de abril de 1850. Es cierto que, incluso los comentarios de sus propios amigos, dejaban ver que se lo veía últimamente a Rosas algo cansado, gordo y que prácticamente no salía de su residencia de Palermo. Tanto es así que terminada la sesión en la Legislatura el Presidente, los diputados y el público que se agolpó para ratificar a Rosas, caminaron hasta la residencia particular del gobernador, que estaba ubicada en la esquina de las actuales avenidas Sarmiento y Libertador, frente al Monumento de los Españoles. Es decir, la caravana de adictos tuvo que recorrer no menos de 55 cuadras de las de hoy para pedirle a Rosas que continúe al frente del gobierno. Rosas salió a la puerta de su casa esa noche y tras hablar con los manifestantes, le expresó al presidente de la Legislatura que haría un esfuerzo para continuar al frente de sus responsabilidades. Era otra dramatización del Maquiavelo criollo.

Juan Carlos Raffo

Polaraffo2000@yahoo.com.ar

Humo de neumáticos

Con gran disgusto vi por TV que manifestantes habían cortado la autopista a Ezeiza, quemando neumáticos que producían un espeso humo negro. Mi padre, que era médico neumonólogo, me decía que la quema de neumáticos producía un humo negro muy cancerígeno, y me mostró un artículo en una revista médica con fotos de un investigador que con un hisopo le ponía en la oreja de un niño un poquito de ese caucho quemado, mancha que en poco tiempo se transformaba en un tumor cancerígeno. En defensa de la salud pública se tendría que haber llevado un camión hidrante de bomberos y apagar con mucha agua esa quema de gomas, para proteger a la gente que circulaba por allí. Tenemos ministros de Salud Pública de Nación, Ciudad y Provincia, que nunca se preocuparon por este importante problema sanitario.

Edgardo R. Purnik

DNI 4.150.074

Turnos en AySA

Pese a que ya se ha dado por terminada la emergencia por la pandemia, esta es la respuesta automática recibida por AySA ante un reclamo: “Gracias por ponerte en contacto con nosotros. Estamos trabajando para enviarte una respuesta. Tené en cuenta que estamos con demoras en los tiempos de respuesta debido a las afectaciones que genera el distanciamiento social, preventivo y obligatorio. Saludos, Aguas y Saneamiento Argentinos SA”.

Hace ya mucho tiempo que las cosas han vuelto a la normalidad y no es comprensible que esta empresa alegue la pandemia como excusa para sus demoras y que siga condicionando a los usuarios, exigiendo turnos para ser atendidos.

José B. Bernard

DNI 4.201.875

En la Red Facebook

Emanuel Monzón, un repositor en Rosario que prepara viandas para personas en situación de calle

“¡Hermosos gesto! La recompensa viene de arriba”- Fabiana De Fina

“Gran familia. Un corazón enorme, ¡gracias!”- Alfonsina Ledesma

“Grosooo...”- Alejandro Centurión

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Fuente: https://www.lanacion.com.ar/opinion/carta-de-lectores/cartas-de-lectores-estropicio-guerra-a-la-inflacion-el-valor-del-peso-nid18052023/

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