A esta altura, justo es decirlo, nadie está exento de recibir llamados telefónicos inoportunos. Le puede pasar a cualquiera. Incluso a la tenista número 1 del mundo, a la que le puede sonar el celular en pleno partido de cuartos de final del WTA 1000 de Roma... Y sí, eso fue lo que sucedió con Iga Swiatek.

La polaca, máxima favorita en el torneo que se juega en el Foro Itálico, recién había comenzado su cotejo ante la kazaja Elena Rybakina. Todavía se estaba disputando el primer game del encuentro, y Swiatek se preparaba para recibir un servicio de su rival, cuando de repente escuchó un sonido inequívoco, y que reconoció de inmediato.

La polaca levantó la mano para solicitar a Rybakina que detuviera el juego, y corrió a su silla para buscar el teléfono celular. Revisó uno por uno los bolsos hasta encontrarlo, y la demora, mientras la jugadora evidenciaba gestos de nerviosismo, hasta generó murmullos y algunas risitas entre los espectadores en el court central del complejo en el que se celebra uno de los torneos más emblemáticos del tour, ya en plena noche romana. Por fin, Swiatek lo encontró, miró el número y le pasó el teléfono a uno de los integrantes de su cuerpo técnico, sin contestar la llamada. “Disculpen”, le dijo la jugadora polaca al umpire, que aceptó lo sucedido. Una distracción de la número 1 del mundo, claramente.

En todo caso, lo sucedido con Swaitek trajo el recuerdo de un hecho similar, que le sucedió a Gastón Gaudio, por entonces campeón vigente de Roland Garros, durante el torneo de Viña del Mar 2005. En pleno encuentro, al talentoso tenista argentino le sonó el celular, que además hacía escuchar un ringtone que decía “¡atendé, Gastón, teléfono!”, y que se escuchó en todo el estadio. Obligado por la situación, a Gaudio no le quedó más remedio que dirigirse hasta donde estaba su bolso y cancelar la llamada, en medio de las risas de los espectadores chilenos.

De regreso a lo sucedido en el Foro Itálico, vale destacar que la noche no terminó bien para Swiatek. La bicampeona defensora de Roma tuvo que retirarse en el tercer set del cotejo ante la monarca vigente de Wimbledon, debido a una lesión en la rodilla derecha, cuando el cotejo estaba 6-2, 6-7 (3-7) y 2-2, tras poco más de dos horas de acción. Es una mala noticia de cara a Roland Garros, el Grand Slam que empezará en menos de dos semanas, y que tiene a la polaca, de 21 años, como campeona defensora y como una de las principales favoritas al título.

Rybakina se enfrentará en la etapa de semifinales con la letona Jelena Ostapenko, quien derrotó por 6-2, 4-6 y 6-3 a la española Paula Badosa para alcanzar su primera semifinal en polvo de ladrillo desde que conquistó el Abierto de Francia en 2017.