El narco chileno Héctor Eduardo Lagos González, de 52 años, que trabajaba para la Municipalidad de Mariano Moreno, fue extraditado a su país de origen para ser juzgado por el Delito de Tráfico de Sustancias de Estupefacientes. El operativo de máxima seguridad fue llevado a cabo por efectivos de la Policía de Neuquén.

La extradición se llevó a cabo este miércoles por la mañana. Según indicaron, Lagos González, apodado “Teco”, se encontraba alojado en la Unidad de Detención de Zapala, durante la espera de su Extradición. La media judicial fue dispuesta por el Juez Federal Subrogante del Juzgado Federal de Zapala, quien dio cumplimiento al pedido de la Justicia chilena, que lo enjuiciará por el Delito de Tráfico de Sustancias de Estupefacientes (delito penado en ese país entre 25 y 30 años de prisión).

Los efectivos neuquinos trasladaron al hombre hasta su destino, Temuco, donde quedó a disposición de la las autoridades de Chile, quienes tomaron todos los recaudos necesarios dadas las circunstancias.

El hombre permaneció detenido en Zapala hasta su traslado.

Cómo lo encontraron

Lagos González, era buscado por Interpol y fue detenido en enero del 2019 por la Policía neuquina, luego de un minucioso trabajo de investigación que realizó la división Antinarcóticos de Zapala. Los efectivos lograron atraparlo en cercanías del paraje “Tres Piedras”, sector ubicado entre la ciudad de Zapala y la localidad de Mariano Moreno

El hombre estaba acusado en Chile por contrabando y tráfico ilegal de drogas tras caer en 2015 con un cargamento de 150 kilos de marihuana en la localidad de Lonquimay, del vecino país.

Los investigadores chilenos lograron desarticular dicha Organización criminal dedicaba al tráfico de drogas, que llegó a realizar un contrabando de 800 kilos de Marihuana en poco tiempo. Fue en este contexto que se dio a la fuga de dicho país, ingresando a la República Argentina de manera ilegal por senderos cordilleranos, y resguardándose en cercanías de Zapala.

Tras la detención, cuando los pesquisas neuquinos comenzaron a cruzar datos y atar cabos sueltos, descubrieron que el narco era cuñado del intendente de Mariano Moreno y era empleado municipal, donde cumplía funciones de sereno en la planta de agua potable durante el turno de noche.