La propina es un tema de debate común entre los comensales, ya que mientras unos aseguran que gratificar a los mozos es una responsabilidad moral, otros apuntan a que es obligación de los patrones pagar lo justo a sus trabajadores. Un grupo de amigos de Boston, Massachusetts, mostró su postura con sus acciones, debido a que cada pocos meses tiene una misión: dar mil dólares a los mozos que se encuentren en la ciudad. El club que fundaron se llama “US$1000 Breakfast Club” y con él han hecho felices a decenas de personas.

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Este club quiere sembrar una semilla de bondad hacia los meseros, de acuerdo con su propia descripción. US$1000 Breakfast Club publica sus generosas propinas en las redes sociales con la finalidad de inspirar a otros a iniciar su propio ‘club del desayuno’ y contagiar su ánimo. El fundador de este movimiento se llama Richard Brooks, quien tuvo la idea con su hermano, motivados por un movimiento similar de que escucharon en California.

Cambiarle la vida a otros con propinas de más de 1000 dólares

Uno de sus recientes beneficiados fue Tulio Maldonado, un mozo que atendió al grupo de amigos en un restaurante de la cadena Ihop, en septiembre pasado. Al finalizar el consumo y cerrar la cuenta, Brooks se levantó y delante de todos comenzó a contar billetes de US$100 frente a Maldonado. Al final, la propina fue de US$1300. “Es increíble”, dijo el mozo sorprendido, según documentaron.

En una entrevista con el canal WCVB5 de ABC, Brooks contó que sus actos de generosidad responden a un trabajo para su propio bienestar. “En cierto modo lo hacemos por nosotros mismos, pero el beneficio es que podemos darle el dinero a esta persona y ella pagará sus cuentas. Te da una muy buena sensación”. El hombre contó que el club comenzó a formarse con gente que no se conocía entre sí y ahora son todos buenos amigos. “Soy profesor, tenemos un dentista que se enteró de esto y quiso unirse. Cuando nos sumas a todos, se convierte en bastante dinero”, dijo Jeffrey Paris, miembro del club.

Pese a que sus bondadosas gratificaciones ocurrieron en Massachusetts, los miembros del club eligieron distintos establecimientos para ayudar a un grupo diverso de personas. Además, explicaron que la razón por la que solo lo hacen durante el desayuno es porque consideran que es el horario en el que las propinas son más bajas. “No es necesario ser millonario o una celebridad famosa para alegrarle el día a alguien”, sumó Paris.

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La respuesta de sus seguidores en redes sociales suele ser positiva, aunque también han recibido reclamos de personas que rechazan que sus actos de bondad sean compartidos ante los medios. “Esta fue solo la primera ronda de un club más magnífico”; “¡Impresionante historia! ¡Tan amable de parte de este grupo ser tan generoso”, son algunas de las reacciones. El US$1000 Breakfast Club comenzó con sus actos de bondad en marzo pasado y su idea es crecer para alcanzar a la mayor cantidad de trabajadores de la gastronomía.