Chelsea y Arsenal protagonizaron una nueva edición del clásico londinense este sábado en la Premier League que terminó en un empate por 2-2, caracterizado por un cúmulo de errores defensivos que llevaron a los cuatro goles del partido. El equipo azul dominó gran parte del desarrollo y estuvo en ventaja por 2-0, pero luego los gunners montaron una remontada para conseguir el empate y mantener su invicto en las primeras nueve fechas de la liga inglesa.

El mal arranque del conjunto visitante, al que se lo vio visiblemente cansado durante la primera hora del encuentro, fue aprovechado de gran manera por los dirigidos por el argentino Mauricio Pochettino, que en el inicio no permitieron que el ataque rival surta efecto y usaron los espacios para generar peligro. Fue así cómo encontraron, a los 15 minutos, el primer gol del partido: un centro de Raheem Sterling fue conectado por Cole Palmer de cabeza, pero su remate rebotó en el brazo del defensor William Saliba, por lo que el árbitro cobró penal a instancias del VAR. Por orden del argentino Enzo Fernández, Palmer fue el encargado de lanzarlo, y convirtió el 1-0 para su equipo.

El primer tanto aumentó notablemente la confianza de Chelsea, particularmente en su ataque, y continuaron utilizando a su favor algunas de las desatenciones tanto en ataque como en defensa del conjunto del norte de Londres. En una de ellas, con apenas dos minutos del segundo tiempo, Ben White se equivocó en un pase y regaló la pelota a Mykhailo Mudryk, que avanzó 30 metros y tiró un centro buscando a un compañero en el área rival. Sin embargo, el arquero de Arsenal David Raya estaba muy lejos de su arco, y no pudo despejar el lanzamiento a medida que se cerraba y se metía en su arco, casi por accidente.

La recuperación de un Arsenal sumamente cansado llegaría una vez que el entrenador Mikel Arteta comenzó a mover el banco de suplentes. Los ingresos de Emile Smith Rowe y Eddie Nketiah a los 22 le dieron mayor energía al equipo, pero también se valieron de la suerte y el estar en el lugar indicado para regresar al partido. A los 31, una salida errónea del arquero Robert Sánchez le permitió al volante Declan Rice definir de media distancia con el arco libre para devolverle la confianza a los de rojo.

El sorpresivo descuento desconcertó a Chelsea, que hasta entonces había sido con mucha holgura el mejor equipo, y permitió que Arsenal aprovechara para salir a buscar un resultado, algo que conseguiría, una vez más, con la ayuda de los cambios. El ingresado Kai Havertz tocó en el medio para Bukayo Saka, que se hizo un hueco y lanzó un centro que agarró a la defensa rival en una postura sumamente pasiva. Los jugadores locales no vieron la llegada de otro ingresado, Leandro Trossard, libre sobre la izquierda, que ayudó a que defina sin marca ante la salida de Sánchez para sellar el 2-2 definitivo.

Gracias a este empate, Arsenal consiguió mantener su arranque campaña sin derrotas en la Premier League, lo que le permite compartir la punta con Manchester City, que previamente había superado a Brighton por 2-1. Sin embargo, si Tottenham vence a Fulham este lunes podrá arrebatarles a ambos la cima por dos puntos. Chelsea, por su parte, continúa con su pobre registro como local: ganó apenas uno de los 5 encuentros que disputó en Stamford Bridge hasta el momento.