Generales Escuchar artículo

Oculto en la selva. Quedará preso el hombre condenado por matar a su mujer que se profugó 22 años y pedía la prescripción

Un hombre que mató...

Un hombre que mató a balazos a su esposa embarazada en una clínica fueguina en el 2000 y fue condenado a 20 años de prisión en 2001, pero que se escapó de la cárcel y estuvo prófugo durante 22 años, finalmente deberá cumplir la totalidad de la pena del homicidio y, además, será juzgado por su evasión del establecimiento penitenciario.

Se trata del hombre, hoy de 70 años, que se presentó espontáneamente hace 15 días ante la justicia para solicitar la prescripción de la causa y su libertad.

Así lo determinó en las últimas horas el Tribunal de Juicio en lo Criminal de la ciudad de Río Grande, en Tierra del Fuego, a instancias de un dictamen previo emitido por el fiscal mayor Martín Bramatti.

La resolución de los jueces Eduardo López y Juan José Varela involucra a Ramón Ángel Abregú, quien el 23 de enero de 2000 asesinó a su expareja Eva Azulina Falcón, al dispararle en cuatro oportunidades dentro de un consultorio de la clínica Cemep de la ciudad fueguina.

El agresor fue detenido de inmediato y condenado a 20 años de cárcel en septiembre de ese mismo año, pero el 15 de febrero de 2001 logró fugarse de un establecimiento penitenciario ubicado en el barrio Margen Sur y, desde entonces, se mantuvo prófugo de la Justicia.

El hombre, que ahora tiene 70 años, se entregó el pasado 17 de octubre ante el mismo tribunal que lo había condenado 22 años antes, y su abogado defensor, Alejandro De la Riva, presentó un escrito solicitando su libertad debido a la “prescripción del caso”.

El recoveco que encontró la Justicia para que cumpla la pena

Sin embargo, los magistrados compartieron los argumentos de la Fiscalía y entendieron que la causa judicial no se encuentra prescripta, por lo que Abregú debería cumplir en prisión la totalidad de la pena y ser juzgado por su evasión del penal en 2001.

Según los jueces, la sentencia a 20 años de cárcel no prescribió porque no estaba firme al momento de la fuga del acusado (restaba un pronunciamiento del Superior Tribunal de Justicia) y, por lo tanto, Abregú nunca pudo ser notificado del fallo definitivo sobre su condena, lo que hubiera iniciado la cuenta para el período de prescripción.

Además, el tribunal consideró que Abregú cometió un nuevo delito al fugarse en 2001, ilícito que se siguió cometiendo hasta el momento en que se entregó a las autoridades hace dos semanas, por lo que tampoco se encuentra prescripto, lo que conllevaría un riesgo de “sentencias contradictorias” si se declara la prescripción del homicidio y hubiera una eventual condena por la fuga derivada de ese mismo delito.

“El ejercicio del derecho a castigar implica el razonable ejercicio de la potestad reglamentaria del legislador con los principios, valores y derechos consagrados en la Constitución Nacional. Nuestra labor se ciñe entonces a comprobar la legitimidad temporal del reclamo estatal, a castigar y garantizar la capacidad de Abregú de ser perseguido por sus conductas punibles”, escribieron los jueces en la resolución de dos carillas a la que accedió la agencia Télam.

Allí también señalaron que, según el Código Penal, “la prescripción se interrumpe por la comisión de otro delito o por la secuela del juicio” y que “existiendo delito pendiente que puede terminar en condena por delito interruptivo (la fuga) no corresponde dictar la prescripción para evitar sentencias contradictorias”.

“La fuga de Abregú impidió que se le notificara del rechazo de recursos y se carece, en consecuencia, de sentencia firme: la evasión interrumpió los actos procesales por ambos hechos: el homicidio y la fuga”, concluye el pronunciamiento judicial.

La última carta del exprófugo

Por otra parte, y aunque su abogado todavía no planteó esa posibilidad, fuentes judiciales admitieron que Abregú podría solicitar la prisión domiciliaria, en virtud de que ya tiene 70 años.

Al momento de su juzgamiento, el paradigma judicial no contemplaba la visión de género respecto del homicidio en perjuicio de una mujer, mediando una situación de violencia, y tampoco se consideró el agravante por el vínculo entre el victimario y la víctima, por lo que Abregú no fue condenado por “femicidio” sino por “homicidio simple”.

Poco después de la sentencia, el hombre logró escapar de la isla hacia Chile escondido en un camión, a través del Paso Fronterizo San Sebastián, y desde allí reingresó al país para refugiarse en una provincia del norte. El asesinato de Eva Falcón produjo una gran conmoción social en Río Grande 20 años atrás.

Según las fuentes de la investigación, Abregú estaba provisoriamente separado de su mujer, pero en las semanas previas al crimen se había acercado a ella con la supuesta intención de reconciliarse.

El día del hecho, Abregú acudió al domicilio de Falcón y la atacó con un arma calibre 9 milímetros. La mujer, embarazada de siete meses, logró escapar con una herida y se refugió en la sala de guardia del sanatorio Cemep, donde su agresor la alcanzó y la remató con cuatro disparos más, según se probó en el juicio oral.

Abregú retornó a Tierra del Fuego sin documentación personal, tras atravesar cuatro controles aduaneros. Finalmente, el 15 de octubre pasado ingresó por la puerta principal al tribunal que lo condenó 22 años atrás y que, ahora, volvió a negarle la libertad.

Agencia Télam.

Fuente: https://www.lanacion.com.ar/seguridad/oculto-en-la-selva-quedara-preso-el-hombre-condenado-por-matar-a-su-mujer-que-se-profugo-22-anos-y-nid02112023/

Comentarios
Volver arriba