Nadaba en las profundidades de un río y halló el diente de un tiburón prehistórico: “Mi reacción fue gritar”
Un joven de 18 años nadaba en las aguas de un río cuando ...
Un joven de 18 años nadaba en las aguas de un río cuando encontró un objeto que lo dejó atónito. Dylan Belson se quedó anonadado al hallar la pieza y, entre la emoción y el terror, alertó a su compañero de buceo sobre su hallazgo y ambos volvieron a la superficie. Luego, descubrieron que se trataba de algo único.
Dylan Belson, de 18 años, y su amigo Hunter nadaban en las profundidades de un río de Carolina del Norte, en Estados Unidos, mientras practicaban el buceo en apnea. En medio de su actividad, el joven encontró una pieza que lo dejó sin palabras y lo hizo gritar, según consignó el diario británico Mirror.
“Mi reacción fue gritar bajo el agua”, expresó el protagonista de la historia, que halló un diente que pertenecería a una especie de tiburón ya extinguida. Según su relato, repetía una y otra vez las palabras “Meg” y “diente” a su amigo Hunter, para que observara la pieza de 15 centímetros de longitud que acababa de encontrar.
Según informó el diario mencionado, el diente que los jóvenes buceadores encontraron en el río pertenecería a un megalodón, debido a su tamaño y forma. Esta especie, que se extinguió aproximadamente hace unos dos millones y medio de años, mediría más de 18 metros y pesaría alrededor de 75 toneladas, lo que equivaldría a 30 tiburones blancos.
El megalodón se convirtió en el protagonista de la ficción en la actualidad, a través de las películas protagonizadas por Jason Statham que llevaron su mismo nombre o el film que se basó en una leyenda mexicana y se encuentra en Netflix, Demonio negro, con la participación de Josh Lucas. Se especuló que esta especie sobreviviría durante aproximadamente 20 millones de años previo a su extinción.
Los dientes del megalodón, un hallazgo que se repiteEn agosto pasado, un niño de 13 años halló también un diente de megalodón, esta vez, en la costa de Reino Unido. Ben Evans se emocionó al encontrar la pieza de diez centímetros, luego de buscar restos prehistóricos entre la arena de la playa de Essex, en Inglaterra, durante dos días.
Abrieron el “huevo de oro” encontrado en el fondo del mar y ya tienen una hipótesis sobre su origen
“Me quedé completamente impactado. Fue un descubrimiento sorprendente para mí”, señaló el pequeño al diario Mirror. Y agregó: “No me lo esperaba. Vi a personas en YouTube que los encontraban en lugares como Florida, pero nunca pensé que vería uno en Inglaterra”. En tanto, el adolescente relató que se acercó a tres rocas grandes y halló un pequeño agujero, donde advirtió el diente.
“Supe de inmediato que era un diente de megalodón. Lo guardaré en mi estante de fósiles y será mi posesión más preciada”, destacó. Las piezas de esta especie de tiburón poseían el tamaño de una banana y eran depredadores de ballenas, delfines, focas y otros tiburones.
Además, este animal poseía una boca tan grande que podía abarcar un mordisco de tres metros de ancho y abrirse lo suficiente como para engullir a dos adultos juntos. “Esos pequeños son bastante fáciles de encontrar, sólo hay que tener buena vista y sincronizarlos correctamente con las mareas”, dijo Jason, el papá del joven coleccionista.
