El año pasado fue la princesa Amalia la que debutó de forma majestuosa en el Día del Príncipe. El martes 19 de septiembre de 2023 fue el turno de su hermana Alexia, quien también superó todas las expectativas y se llevó las miradas no bien descendió de la berlina de gala, en la que viajó con sus tíos, los príncipes Constantino y Laurentien. La hija del medio de Guillermo Alejandro y Máxima –que el 26 de junio cumplió 18 años– brilló en la apertura del Parlamento, que sin dudas es uno de los eventos con más pompa del calendario de la familia real neerlandesa y en el que el Rey pronuncia el Discurso del Trono, donde expone las líneas importantes del Gobierno para el próximo año.

Desde media mañana, miembros del Senado y de la Cámara de Representantes se dirigieron al Teatro Real acompañados de una formación de la guardia de honor militar. También estuvieron presentes el vicepresidente del Consejo de Estado, el presidente del Senado y el presidente de la Cámara de Representantes. A las 13, los Reyes –acompañados por su hija mayor, Amalia– salieron en la carroza de cristal desde el Palacio Noordeinde de La Haya y a su llegada, fueron Máxima y la princesa heredera quienes impactaron con sus fabulosos looks. La monarca optó por un conjunto en tono damasco y un original abrigo con estampado digital de flores pintadas a mano. Por su parte, Amalia llevó un traje drapeado en un azul Klein. La debutante princesa Alexia eligió para su gran día un vestido fucsia de manga larga y una pequeña capa decorada con cintas de seda. Tanto Amalia como Alexia sumaron a sus outfits accesorios con historia ya que fueron usados por su madre en ocasiones anteriores.

Puertas adentro, el rey Guillermo recordó en su discurso sus comienzos como soberano de los Países Bajos. “Hace diez años se me permitió pronunciar el discurso desde el trono por primera vez ante ustedes. Diez años que miro hacia atrás con gratitud. Algunos acontecimientos fueron conmovedores y cargados de tristeza, como el ataque al vuelo MH17. En otras ocasiones, la emoción iba de la mano de la sanación y la conexión, como el 1 de julio de este, durante la conmemoración de la abolición de la esclavitud. Naturalmente, pensamos en la época del coronavirus, que tuvo un impacto tan profundo en la vida personal de todos. Y, por supuesto, pienso en la guerra en Ucrania. Son momentos como estos que siempre serán parte de nuestra historia y que están grabados en tu memoria y en la mía”, dijo Guillermo. A su lado, Máxima debió secarse las lágrimas de emoción en más de una oportunidad.