Fluminense, en la previa de la final de Copa Libertadores con Boca y con el argentino Germán Cano entre sus titulares, goleó a Goiás por 5 a 3, en un partido de la fecha 29 del Brasileirao, el campeonato brasileño de Primera. Sin embargo, fue Felipe Melo quien activó las alarmas al sufrir una lesión, y ahora es duda para el choque que dirimirá el título continental el sábado 4 de noviembre en el Maracaná.

Los corazones del conjunto carioca se paralizaron cuando a los 29 minutos el futbolista fue a disputar una pelota con Matheus Babi en la mitad de la cancha. Con la intención de anticipar, el zaguero de 40 años metió su pierna izquierda en la acción y luego comenzó a renguear. De inmediato, se tiró al césped y pidió el cambio (fue reemplazado por Vinicius Moreira), ante el rostro preocupado de Marcelo y otros compañeros.

En una imagen similar a la que se había visto el martes en Avellaneda, cuando Darío Benedetto evidenció ante las cámaras un problema muscular, en el caso de Melo también fue captado cuando, ya fuera del campo y en diálogo con su entrenador, Melo hizo un gesto que podría interpretarse como un supuesto tirón.

ATENCIÓN BOCA: LA JUGADA QUE LESIONÓ A FELIPE MELO. EL JUGADOR DE FLUMINENSE PIDIÓ EL CAMBIO.

📺 El Brasileirao, por #StarPlusLA pic.twitter.com/q3zvjK6ih9

Si bien hay que aguardar el resultado de los estudios, la preocupación por su estado de salud copó la agenda del Flu, ya que existen tres escenarios: que sea una simple molestia, que haya distensión o que se haya desgarrado, lo que lo marginaría de la gran final de América ante Boca, equipo por el que Felipe Melo siempre expuso su fanatismo.

El DT Diniz minimizó el hecho de haber recibido dos goles en los primeros 13 minutos del partido y atribuyó esa distracción al hecho de ya estar pensando en la final con Boca. “Creo que todo tiene que ver con la ansiedad. Vamos a jugar el partido más importante de la historia del club y el partido más importante para mucha gente. Por mucho que intentes permanecer en el presente, es muy difícil”.

En relación al partido decisivo con el conjunto Xeneize, el DT de Fluminense resumió: ”Tenemos un plan estudiado para la final, pero no es algo que esté cerrado. Habrá que esperar un poco para saberlo”. Asimismo, anticipó: “El equipo tiene muchos recursos tácticos, ya que llevamos un año y medio juntos. Y cuando estamos concentrados, como lo estaremos en la final, reducimos mucho nuestros errores. Espero que en la final el equipo esté muy ajustado y muy concentrado para hacer un gran partido”.

Lejos de transferirle a sus dirigidos la presión, reconoció: “Para mí también es el partido más importante de mi carrera. Por eso trabajo mucho en mi cabeza el vivir el presente de la mejor manera posible. Debo intentar transmitir a los jugadores ese mensaje. Pero es difícil”.

La enfermería de Flu ya tiene varias camillas ocupadas. Nino, el capitán del equipo, sigue recuperándose de un esguince en su rodilla. Y John Kennedy, uno de sus mejores jugadores, sufrió una pubalgia en la previa del partido con Red Bull Bragantino, lo que lo marginó de ese encuentro y del disputado anoche ante Goiás. Hasta el momento es una incógnita saber si el socio de Germán Cano en el ataque del conjunto carioca será de la partida ante Boca.

“No hay forma de que podamos decir si podrá jugar la final o no. El tratamiento es de cuatro a seis semanas, pero varios otros factores entran en juego cuando se habla de un atleta de alto rendimiento. Solo el cuerpo técnico puede determinarlo, la posibilidad de que juegue, existe, pero dependerá de la recuperación del deportista y de lo cerca que esté del día del partido”, dijo sobre Kennedy el doctor Lauro Arêas, especialista en pubalgia, en declaraciones que consigna UOL Esporte.

En lo referido al juego, fue un partido electrizante. Fluminense tardó en reaccionar y a los 5 minutos ya estaba perdiendo 1 a 0 como consecuencia de un gol de Allano, que desairó a Marcelo con dos enganches. Y a los 13, Matheus Babi marcó el 2 a 0.

Precisamente Felipe Melo fue el autor del descuento, con un cabezazo a los 17. Y a los 37 llegó la igualdad, por intermedio del colombiano John Arias. Ya en la segunda parte, el equipo dirige Fernando Diniz se puso en ventaja con otro gol de Arias y estiró la ventaja con dos golazos de Keno. Poco después, el argentino Julián Palacios sorprendió con una tremenda chilena para anotar el descuento visitante y darle cifras definitivas al encuentro.

Fluminense se ubica octavo en el Brasileirao con 45 puntos (a 14 del líder Botafogo), en parte, debido a que ganó solo cuatro de sus últimos 10 partidos. Los otros fueron dos empates y cuatro derrotas. Antes de la gran final de la Libertadores, disputará dos partidos. Este sábado visitará a Atlético Mineiro, mientras que el martes hará lo propio frente a Bahía.