Días después de la Coronación de Carlos III y tras semanas de rumores, los padres de Kate Middleton, Carole y Michael, vendieron su empresa, Party Pieces, un negocio online con artículos de decoración y regalos para fiestas y eventos infantiles. Desde el pasado jueves pertenece a James Sinclair, dueño de Rossi Ice Cream, Marsh Farm y Twizzletops. Creada, en 1987, por la compañía de los Middleton pasaron todos los miembros de la familia, incluida la princesa de Gales, para trabajar en distintas tareas.

Un mes atrás, se hizo público que la empresa atravesaba una delicada situación financiera tras importantes pérdidas y la cadena de televisión Sky News adelantó que los suegros del príncipe William habían recibido las primeras ofertas de compra. Ahora, el mismo canal y otros medios británicos confirmaron que, efectivamente, ya está en manos de Sinclair que llegó a un acuerdo con Carole y Michael después de que, según apuntan fuentes al mencionado medio, se declarara en quiebra.

Party Pieces fue para los Middleton, además de un negocio, el trampolín que los posicionó en la élite social inglesa y lo que permitió que los tres hijos del matrimonio Kate, Pippa y James pudieran acceder a una educación de élite. Carole, toda una visionaria, fue quien se dio cuenta del nicho temático que había en el mercado y no dudó en dejar su trabajo de azafata en British Airways para convertirse en empresaria.