Uno de los dos peligrosos delincuentes que la semana pasada se fugaron de la cárcel de Sierra Chica se entregó ayer en Lanús. Mientras, siguen los operativos para dar con el otro evadido.

Se trata de Matías Joaquín Sánchez Honores, que se encontraba privado de la libertad por causas graves: un homicidio calificado y una tentativa de homicidio, pero que, a pesar de esos antecedentes, había accedido al régimen abierto de la Unidad Penal 27 del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB).

El hecho se produjo el miércoles de la semana pasada, cuando Sánchez Honores y Cristian Sosa Mazurik –detenido desde 2019 por portación ilegal de arma y robo agravado– aprovecharon que estaban en una actividad en el patio (un partido de fútbol) y saltaron un alambrado para subirse a una camioneta Toyota Hilux que los esperaba afuera de la unidad penitenciaria, en Legorburu y Centenario.

Ambos reclusos estaban a disposición de jueces de Ejecución Penal de Lomas de Zamora y Mercedes, y estaban en las últimas etapas de sus respectivas condenas, lo que les permitió, por el régimen de progresividad en el cumplimiento de la pena, estar alojados en el sector de régimen abierto del complejo de Sierra Chica.

Por la fuga se abrió una causa, que está a cargo del fiscal Lucas Moyano, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°22, descentralizada en Olavarría.