Ovidio Guzmán, uno de los hijos del capo narco mexicano Joaquín “El Chapo” Guzmán, fue extraditado a Estados Unidos. Allí, el joven de 33 años que desde principios de años estaba en una cárcel de alta seguridad de Altiplano, tiene cargos por tráfico de fentanilo, “un opioide sintético hasta 50 veces más fuerte que la heroína”.

“Hoy, como resultado de la cooperación policial entre Estados Unidos y México, Ovidio Guzmán López, un líder del Cartel de Sinaloa, fue extraditado a Estados Unidos”, dijo el fiscal general estadounidense, Merrick Garland, en un comunicado. Según señala la agencia Reuters, dos funcionarios mexicanos relacionados con el tema también confirmaron la extradición.

De acuerdo a los dichos de Garland, el envío de Guzmán a Estados Unidos constituye “el último paso” en los esfuerzos para atacar “todos los aspectos” de las operaciones de narcotráfico dirigidas por el poderoso cartel de México, asociado durante mucho tiempo con la familia Guzmán.

“Agradezco a nuestros homólogos del gobierno mexicano por esta extradición. El Departamento de Justicia seguirá culpabilizando a los responsables de alimentar la epidemia de opioides que ha devastado demasiadas comunidades en todo el país”, agregó.

En ese sentido, afirmó que “la lucha contra los cárteles ha implicado un valor increíble por parte de las fuerzas del orden de Estados Unidos y de los miembros del servicio militar y de las fuerzas del orden mexicanas, muchos de los cuales han dado sus vidas en la búsqueda de la justicia”.

El gobierno estadounidense había pedido la extradición en febrero de 2023 para que pueda enfrentar cargos penales en un tribunal de ese país. Guzmán y sus hermanos, según se desprende de una serie de documentos judiciales, “controlaban amplias operaciones internacionales en el comercio de fentanilo, obteniendo cientos de millones de dólares en ganancias al “inundar” Estados Unidos” con esa sustancia.

Dos años antes, el Departamento de Estado ofreció una recompensa de 5 millones de dólares por información que condujera al arresto o condena de Ovidio Guzmán, quien había sido arrestado inicialmente en 2019, pero fue liberado casi de inmediato por orden del presidente Andrés Manuel López Obrador “para evitar un derramamiento de sangre después de que sicarios comenzaron una seguidilla de violentos enfrentamientos.

Su padre, “El Chapo”, quien fue líder del Cartel de Sinaloa, cumple cadena perpetua en una prisión estadounidense.

Con información de Reuters