Cuando de cuidar nuestra salud se trata, la alimentación desempeña un papel fundamental en la prevención de enfermedades y en la mejora del bienestar general. Por este motivo, una dieta saludable no solo reduce el riesgo de enfermedades crónicas, sino que también tiene un impacto positivo en el estado de ánimo y la calidad de vida.

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En este contexto, es esencial seguir un plan alimentario que satisfaga las necesidades calóricas del cuerpo y proporcione las vitaminas, proteínas y minerales necesarios. Uno de los minerales cruciales para el desarrollo y fortaleza de los huesos es el calcio, que, al igual que la vitamina C, se adquiere mejor a través de la alimentación.

El calcio es un mineral esencial para la formación y el desarrollo de los huesos. La mayoría del calcio se almacena en los huesos y los dientes, proporcionándoles estructura y rigidez. Además, es necesario para que los músculos se contraigan y los nervios transmitan señales desde el cerebro a todo el cuerpo.

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Los alimentos ricos en calcio incluyen una variedad de opciones, como quesos como el Gruyere y roquefort, sardinas en aceite, almendras, cigalas, langostinos, gambas, queso de Burgos, yogur, garbanzos y leche de vaca. Aunque la leche no encabeza la lista, es importante recordar que la diversidad en la dieta es clave.

En este punto, debemos decir que la almendra, un fruto seco que contiene proteínas, grasas saludables, fibra y calcio, es una excelente opción para obtener calcio de manera natural.

Además, las almendras también aportan otros nutrientes esenciales, como fósforo, magnesio, hierro, zinc y vitaminas. Se recomienda una porción de 25 gramos como medida ideal para fortalecer la salud. Así es como te contamos que es el alimento con más calcio que la leche y que los expertos recomiendan incluir en nuestra alimentación.