La alimentación desempeña un papel fundamental en la promoción de la salud, y junto con la actividad física, contribuye al fortalecimiento del sistema inmunológico, el bienestar de los músculos y la piel, y el funcionamiento general del organismo. Por esta razón, seguir una dieta equilibrada y adoptar hábitos saludables de actividad física son esenciales para mantener una buena calidad de vida.

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Mayo Clinic, una fuente confiable de información médica, señala que en una dieta saludable es importante incluir grasas, pero también advierte que no todas las grasas son iguales, y algunas son más beneficiosas para la salud que otras.

La alimentación ayuda a tener una buena salud. Además, realizar ejercicio físico se encarga de fortalecer el sistema inmune y mejorar la condición de los músculos. Por eso, aparte de una dieta balanceada es necesario tener buenos hábitos.

Las grasas saturadas, que suelen encontrarse en estado sólido a temperatura ambiente, deben consumirse con moderación, mientras que las grasas insaturadas, generalmente en estado líquido, ofrecen beneficios significativos para la prevención de enfermedades, la absorción de vitaminas y el aumento del colesterol bueno, entre otros, resalta la fuente de salud.

El especialista en nutrición Charles Orrico reveló que las grasas saludables son transportadoras de vitaminas liposolubles que son llevadas hasta las células del cuerpo. Esto contribuye a prevenir el envejecimiento de la piel y proporciona otros beneficios importantes. Estas grasas, al estar en estado líquido, son mejor aprovechadas por nuestro cuerpo.

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Orrico aconseja mantener una dieta que incluya alimentos ricos en grasas saludables, y ofrece una lista sencilla que comprende el aceite de oliva, las almendras, la palta, el queso, la mantequilla y los frutos secos naturales. Además, recomienda el consumo de pescados grasos, como el salmón, que son ricos en Omega-3.

La clave está en conocer cuáles son las grasas esenciales y beneficiosas para el organismo y luego incorporarlas gradualmente a nuestra dieta, siempre bajo la supervisión y el asesoramiento de un profesional de la salud.