En los próximos días, los residentes de una remota región de Estados Unidos obtendrán un importante estímulo económico como parte de un fondo especial que se crea cada año a partir de las ganancias del petróleo y otras actividades productivas en la zona. Para cobrar el deseado cheque deben comprometerse con quedarse a vivir en el estado y mantener un comportamiento cívico sin faltas.

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El llamado Dividendo del Fondo Permanente (PFD, por sus siglas en inglés) se abrió a finales de la década de los setenta como una especie de gratificación anual, originada por el gobierno de Alaska para beneficiar a los residentes elegibles con parte de las ganancias generadas por la explotación de los recursos naturales de esta extensa región en el extremo noroeste de América del Norte.

En 2023, el monto que puede recibir cada habitante es de US$1312, según explica en su sitio web el Departamento de Hacienda estatal que se encarga de administrar los recursos. A pesar de que en octubre ya se emitieron dos rondas de pago iniciales, nuevas entregas se harán efectivas el próximo 16 de noviembre y otra más antes de terminar el año, el 14 de diciembre.

Para poder recibir uno de estos pagos, los residentes en Alaska deben tener intención de permanecer en el estado indefinidamente, no haber sido condenados por delitos graves y no reclamar la residencia en otro estado durante el año en curso. Las solicitudes para el programa comenzaron el 1º de enero y se aceptaron hasta el 31 de marzo pasado.

El bono que deriva del PFD que recibe cada persona se pueden usar libremente, ya sea para pagar cuentas, hacer compras o ahorrar. Para saber si alguien tiene derecho a cobrar el cheque en la próxima entrega, simplemente habría que revisar el estatus de la solicitud en el portal del gobierno de Alaska y si aparece la leyenda de “Elegible-No Pagado”, entonces el cheque correspondiente estaría en camino.

“El PFD 2023 marca el año 42 en que los alaskeños reciben su parte de la riqueza generada por los recursos naturales del estado”, declaró el comisionado del Departamento de Hacienda, Adam Crum, en un comunicado difundido por el diario Washington Examiner. El funcionario explicó que estos dividendos son una inyección de más de mil millones de dólares a la economía de Alaska y el entusiasmo por recibir parte de esta bolsa se refleja en el hecho de que este año lograron 8000 solicitudes más, en comparación con lo que contabilizaron en 2022.

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Aunque contar con una gratificación de más de US$1300 para gastar en lo que sea puede parecer una idea atractiva para la mayoría de las personas, cuando los responsables del PFD anunciaron el monto que se pagaría en 2023, algunos residentes criticaron la reducción del pago respecto al monto que se entregó el año pasado, que fue de US$3284 por cada beneficiario.

“Entiendo perfectamente la mentalidad de ‘al menos es algo’ o ‘esto es mejor que nada’, y debemos estar agradecidos por lo que recibimos, pero también tener esa mentalidad es lo que permite a los políticos robarte parte de tu PFD. Está bien estar agradecido y enfadado al mismo tiempo”, comentó una residente en la publicación de Facebook con el anuncio del pago de este año.