Como cada vez que aparece en público, Carolina de Mónaco volvió a robarse las miradas con su estilo impecable. Como presidenta honoraria del Mónaco Garden Club (su madre, Grace Kelly, lo fundó en 1968), la princesa de Hannover dijo presente en la 54 a edición del concurso internacional de ramos para ser parte del jurado especial y sorprendió a todos con su look exótico y relajado: repitió un vestido-kimono con estampa de inspiración tribal de Johanna Ortiz y le sumó aros de madera y cartera de rafia.

Acompañada por su hija menor, la princesa Alexandra, Carolina recorrió cada uno de los stands y se tomó todo el tiempo necesario para charlar con los expositores y ver los arreglos florales que recreaban la magia del circo, la temática de este año, elegida en honor al príncipe Raniero, gran admirador del ambiente circense.