Antes de ir al Tedeum, el presidente Alberto Fernández tuvo un breve diálogo con los medios en la Casa Rosada, donde confirmó que no estará esta tarde en la Plaza de Mayo, en el acto que encabezará Cristina Kirchner como única oradora. De todas formas, habló de “unidad”, recordó a Néstor Kirchner a 20 años de su asunción y exhortó a “estar todos en la Plaza”, aunque lo hizo con un mensaje contradictorio.

“Es un 25 de mayo muy especial para mí. Es el último de este mandato, con lo cual lo celebro de un modo especial. Los 25 de mayo nos convocan a repensarnos como sociedad. Es un día especial porque hace 20 años entramos con Néstor a esta Casa de Gobierno y no puedo dejar de recordarlo. Me acuerdo de cada detalle y me emociona ese recuerdo”, dijo, justo antes de salir para la Catedral.

Pidió además a los argentinos “unidad y reflexión”, para entender que se pueden superar los problemas. “Hay algunos que se multiplican, como la sequía, que hace todo tan difícil para la economía del país. Tenemos que ser capaces de estar juntos y de lograr los objetivos que tenemos que lograr”, destacó, antes de caminar para el oficio religioso junto al ministro de Economía, Sergio Massa -que también estará en la convocatoria del kirchnerismo-, y otros miembros de su Gabinete.

Fue en ese contexto que insistió con su invitación para el acto de Cristina Kirchner. “Para los que somos peronistas, tenemos que estar todos en la Plaza recordando a Néstor. Yo no voy a estar, pero Néstor nos une”, dijo, sin nombrar a la vicepresidenta.

Para justificarlo, explicó que él no estará porque debe encontrarse con su familia en Chapadmalal. “Pero es 25 de mayo, por favor, no busquemos un título para que nos peleemos. Tenemos que estar más juntos que nunca”, reclamó.

Después, el Presidente participó de la misa. Cuando la ceremonia religiosa terminaba, tomó el micrófono, agradeció que lo dejaran decir unas palabras y contó que asistía muy emocionado porque este era su último Tedeum. En ese contexto citó y elogió a Francisco, y relató: “El Papa siempre estuvo ayudándome. Hoy lo hago público, porque siempre lo hizo en silencio. Nunca dejó de ayudar cuando la Argentina lo necesitaba”.

“Es este el último 25 de mayo de mi mandato, también del suyo, querido cardenal. Es para usted y para mí un 25 de mayo distinto. Quiero poner en valor sus palabras, de verdad, porque creo que tenemos que ser capaces de mostrar la convivencia democrática que nos falta y que no hemos sabido construir en todo este tiempo”, afirmó. Poli había llamado a la unidad, a evitar las confrontaciones y a dejar de echar culpas al pasado.

Dijo también Fernández que hay diversas miradas y aspiraciones sobre el país, pero que en el Gobierno están vigentes “todos los compromisos” por los que el sacerdote pidió, como el de prestar atención a “los que menos tienen”.